Un día en el laboratorio.

Ayer Fernando, mi jefe de tesis, me dió una recomendación: "No le digas a tu nuevo jefe que tienes un blog, por lo menos hasta que no te haya visto trabajar. Si no va a pensar que estás todo el día de fiesta, rodeado de chicas...". Yo le dije que ya cometí el error aquí, pero que tampoco voy a poner lo que hago en el laboratorio porque sería muy aburrido: hoy he contado 307 haces de noltii y he medido 82 almejas (ancho, alto, largo y peso), y ... Pues eso, hoy he tenido un día un estresante en el laboratorio y lo pondré aquí, para que veáis que aunque no lo parezca soy una persona responsable y trabajadora.
El día de hoy yo quería acabar 3 tareas en el laboratorio: separar y biomedir una muestra de zostera noltii, preparar unos sedimentos para mandarlos a medir el isótopo N15 (para determinar las rutas alimenticias en la pradera de fanerógamas) y por último incinerar otras muestras de sedimento para determinar la cantidad de materia orgánica que posee. Sé que la mayoría no entendéis ni papa, pero haceros a la idea de que son 3 tareas.
Nada más llegar, tras enterarme la tarde de antes de que la mufla de nuestro laboratorio no funciona (una mufla es un horno que alcanza los 500ºC), me fui a la planta de abajo con mis muestras todo feliz, pero al llegar a la mufla número dos me la encuentro llena de mierda (arena y papel de aluminio tirado por doquier). Entonces pienso, y voy a preguntarle a Juanlu y a su compañera (ahora mismo no recuerdo su nombre, creo que era Manuela, pero dudo) y me dicen que esa mufla tampoco funciona, así que me dirijo a la mufla número 3. Pero la mufla número 3 está ocupada hasta la 1 de la tarde y yo tengo que meter mis muestrar 5 horas, por lo cual decido posponer la primera tarea para la semana que viene. Horas más tarde me entero de que la mufla número 3 también estaba sin funcionar, así que en vez del lunes haré mis cosas el martes o el miércoles.
Esta fue la primera frustración, y no hay nada que más me sulfure que no poder hacer mi trabajo por causas ajenas, como fue el caso. Entonces decidí acidificar mis otras muestras de sedimento para mandarlas a isótopos. Pero cuando comienzo a verter ácido en ellas, me empieza a burbujear y salirse por todos los lados, por lo cual tuve que cambiar unas 50 muestras de sedimento a recipientes algo más grandes, y etiquetarlos (menos mal que Vanessa me ayudó). Creo que Vanessa ya me vió estresado a primera hora, y vió como a poco la ira se apoderaba de mí y al final casi me echó para que me fuera a descansar. Es lo malo de exogirse unas metas y no poder cumplirlas. El caso es que tras cambiar de botes, echar el ácido y dejarlo acutar durante 3 horas, me dispongo a liofilizar las muestras (si alguien quiere saber qué es liofilizar que pinche AQUÍ) y al hacer vacío empieza de nuevo a burbujear. Mierda. La estoy liando parda. Decido echarle agua destilada (no sé por qué) y lo vuelvo a meter a liofilizar. Cuando estoy preparando la máquina de liofilizar se me cae una urna de cristal, dando un sonoro golpe y rompiendo un recipiente de cristal. Juanlu y María (la chica que ocupó la mufla pero que al no funcionar la ocupará el lunes, y también la chica que me está aconsejando donde instalarme en Granada, porque ella es de allí) vienen a ver que ha pasado y si estoy bien. Físicamente estoy bien, mentalmente estoy harto, por no decir hasta el ... (no que luego lo lee Fernando y piensa que soy un mal hablado). Pues eso, pongo las muestras con agua y... MIERDA!!!, sigue burbujeando. Soy lo más pardo porque si lo hubiera pensado ni me hubiera molestado en añadir el agua. Entonces... tras hablar con Fernando, darme cuenta de que mecánicamente (o manualmente) es imposible sacar el agua, decidimos menterlo en la estufa a 60ºC. Otra vez me doy cuenta de que soy un pardo. Meterlo en la estufa perjudica la medición de isótopos Nitrógeno 15, pero lo que queremos medir es Carbono 13. SOY PARDO. Tras meterlo en la estufa decido que no puedo más y me marcho a casa.
Pero entre todo este follón, también estuve separando haces de zostera noltii, exactamente 307 haces, lo cual se dice pronto. Bueno, todos no porque Vanessa me echó una mano cuando vió que me estaba agobiando de nuevo con el tema de los ácidos y el liofilizador. Pero a la hora de biomedir 10 haces, 10 raíces y 10 rizomas, nos percatamos de que no hay hojas impresas con los formularios de biometría. El destino es cruel y no quiere que acabe ninguna de mis tareas. Me cago en la...

Pues en resumen, con un poco de mucha suerte para el lunes tengo las muestras de Nitrógeno15, y las plantas... ni idea, lo intentaré hacer. También hay que tener en cuenta que el lunes, el martes y el miércoles vamos a muestrear, lo cual significa cargarnos demasiado de trabajo en poco tiempo. Encima el jueves me iré a Granada con mis padres para hablar con mi nuevo jefe, firmar los papeles de la Beca y buscar casa. Todo esto quiere decir que andaré muy ocupado, demasiado, pero el fin de semana lo aprovecharé para descansar en Granada con la familia, para retomar la siguiente semana con fuerzas.

Y creo que ya no me voy a alargar más. Si hubiera sido un día normal de laboratorio no sé si hubiera impactado tanto el relato, pero a lo mejor un día de esto lo relato, para que mi jefe no se queje y para aparentar ser una persona trabajadora y responsable (os aseguro que lo soy, aunque no lo parezca). Pues nada más, seguiré preparando las cosas que me voy a llevar la semana que viene a Granada, para que a finales de mes sólo tenga un par de macutos para llevarlos en el autobus.

Mucha suerte a todos (que a mí hoy se me ha perdido).