En la Feria de Jerez.

Tras una semana muy dura (por lo menos para mí), llegó el fin de semana, y el sábado era día de feria en Jerez, así que para allá fuimos. Aunque en principio íbamos a coger el tren de las 13:05 un pequeño percance, o cremallera rota, en el traje de gitana de Mercedes nos hizo coger el siguiente, pero mientras tanto dimos buena cuenta del rebujito hecho por el propio Jose (me estoy especializando en cocktails). Tras esto, seguimos con el rebujito camino de Jerez.

Después de llegar a la feria, y tras un largo y tedioso paseo en busca de algún lugar donde comer (yo iba ya un poco achispado, lo cual me hacía más duro el camino) encontramos nuestro lugar.

De izquierda a derecha: Helena, Mercedes, José, Patricia y Tere. (¡¡que bien acompañado voy!!)

Después de comer, tocó baile y más rebujito, donde algunas bailaron más que otros. Eso sí, Mercedes nos introdujo en el baile de sevillanas, aunque yo no estaba muy fluido, por lo que he preferido omitir esas imágenes. Aunque queda pendiente las siguientes lecciones para futuras ferias, que tengo que hacer valer esa sangre andaluza que fluye por mis venas; además de aprovehar para arrimar (eso es lo que me enseñan mis amigas, mamá).

Dejo también alguna típica foto bomba, aunque la primera no lo fue:

Aquí merendando (saltándome mi operación bikini):

Y tras un paseo por los puestos de la feria con Mercedes y Helena, ya que Patricia y Tere se fueron antes, nos volvimos al tren. En éste hubo espectáculo musical con guitarra incluida, son cosas de los excesos.

Además, algunas cayeron rendidas (cosas de la edad):
Y hasta aquí todo, siento haber sido escueto, pero en resumen mucho rebujito, mucho caballo, muchas mozas vestidas de gitanas y muy buena compañía. Nos vemos en otra feria, donde intentaré pulir mi técnica con las sevillanas (y con el baile también).