¿Qué hay detrás del Cambio Climático?

Tras dos días y poco (muy poco) estudiando intensamente una asignatura titulada "Océanos y Cambio Climático" o algo similar, tras un examen un poco tenso pero fácil (porque hubo filtraciones) y tras una partida al mus en el césped en la cual Ricardo y yo enseñamos cómo se juega a mis 2 fanes números 1 (aunque dicho título está siendo muy disputado últimamente, ya que cada vez tengo más adeptos, aunque muchos todavía no se dan a conocer)... tras todo esto antes dicho.... tocó descanso, por fin.
Decidimos darnos un pequeño paseo por el campo, cámara en mano, para ver qué "cazábamos". Vimos muchos conejos, gaviotas, alguna garceta común, escarabajos, caracoles... y no sé si se me escapa algo más, pero en definitiva el balance no nos agradó mucho, poca diversidad, pero como toma de contacto no está mal. Os dejo mis mejores fotos:

Muchas gaviotas, alguna intentó agredirme.

Telaraña si araña a la vista.

Escarabajo en un conjunto de flores.

Escarabajo en el suelo.

Los 4 fantásticos, que supongo que ya serán conocidos por todos mis seguidores.

Después de mucho pensar y sopesar diferentes opciones, decidimos tomarnos unas cervezas en la playa de la Caleta, emblema de la ciudad. Antes de eso tuvimos que esquivar una romería (donde algunos llegaron antes que algunas a Cádiz), esquivar a una romera que se creía la reina del mundo y andaba por la carretera porque le salía del toto y pasear a la pobre Ikatz, que vive recluida en su transportín porque en la soledad le da por engullir cualquier cosa: gafas, zapatillas, calcetines...
Ya una vez en la Caleta, con unas papas Franjosé, fritos y ruffles al jamón, con cervezas, cocacola light y agua, y con unos bocatas de tortilla que en teoría no pueden llevar nada más pero luego sí (ejem!) comenzamos a disfrutar de nuestra mutua compañía, de las guitarras tocadas por Eddie, Alberto y Mercedes, de la hermosa voz de Mercedes... e incluso de algún asiento sofisticado para ir al campo, la playa o el césped (yo lo caté poco, aunque me sé de dos que lo disfrutaron a tope).
Y así transcurrió la noche, en un ambiente apacible, en un lugar hermoso, con una compañía espléndida e incluso con una temperatura adecuada (ni frío ni calor).
Pues nada más, os dejo otra ristra de fotos, que me voy a poner con el estudio.

El sudaka y yo.

¡¡¡Mirad!!! ¡¡¡no se nos nota la papada!!!

Mis fanes más acérrimos (o aférrimos?)

Alberto, con la guitarra de Mercedes.

Mercedes, seguramente diciendo verdades como puños.

La Caleta in the night.